Los que hemos visitado esporádicamente la plaza de Copallín, hemos visto siempre un león solitario y triste; hoy felizmente "Leonardo" el león, que aguardó durante años a su pareja, está feliz porque descansa placidamente junto a "Lea" la leona.
Leonardo está muy feliz y esto lo demuestra porque su pelaje y melena están más brillantes y en su rostro se evidencia un halo de felicidad.
Cuentan los pobladores, que una noche Leonardo visitó en sus sueño al alcalde de Copallín y le rogó le consiguiese una compañera. El alcalde al día siguiente dio las instrucciones y empezaron a esculpir una pareja para "Leonardo".
(Elvis Chugna)
(Elvis Chugna)
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